jueves, 20 de junio de 2013

La teta y la Luna (al querer)


Existen 3 niveles de personas pesadas (según mi criterio, claro)...las pesaditas, las pesadas y las pesadas de cojones. A mi me ha tocado lidiar con éstas últimas varias veces en estos 3 años que llevo de lactancia y la verdad es que me he dado cuenta, de que no hay nada en esta vida, como conseguir que lo que opinen los demás, te la traiga al pairo.

3 veces puse fecha límite a la lactancia. Las 3 veces lloré solo de pensarlo.
Al final, mi corazón y mi razón hicieron las paces, llegaron a un acuerdo unánime y gritaron al mundo aquello de..."le voy a dar teta hasta que me salga de los ovarios"!!!...

Uno tiene que ser feliz con lo que hace, valorar qué le resulta realmente importante y luchar por ello. Sin historias. Sin miedos. Sin dudas...y casi casi sin oídos!!...

Siempre he encontrado un montón de momentos en mi día a día en los que me he reafirmado que soy muy feliz...uno de ellos, de los que más, es el momento teta.
Vale que soy feliz con poca cosa porque como decía aquel..."yo necesito pocas cosas y lo que necesito lo necesito poco", pero si se me intenta quitar o limitar lo que me hace feliz, muerdo!!!...(pero además con dientes de bulldog adiestrao que pueda llegar a dar miedo hasta a un león!!!)

La lactancia es lo más bonito que he hecho en mi vida por otra persona. Creo que ese vínculo madre-hija es algo único y mágico que solo quien lo vive lo puede entender.

También he de decir que el principio no fue fácil. Si en el libro de Carlos González ("un regalo para toda la vida", que me leí de pe a pa antes de dar a luz) explicaba con detalle los males que se podían tener durante la lactancia...yo, los tuve absolutamente todos (avariciosa que es una).
Grietas, mastitis, candidiasis, obstrucción...vamos...que pasé unos primeros meses, que ríete tu de las torturas chinas, medievales o la inquisición. Aún recuerdo los bocaos que le pegaba yo al mordedor que suelen dar a los bebés al salirles los dientes, cada vez que mi niña mamaba.

El apoyo y la fuerza me la dieron en el grupo de lactancia al que empecé a ir desde que estaba embarazada de 6 meses. Sin ellas, la verdad es que no sé si hubiese sido capaz de seguir adelante.
De ahí, que cuando pasaron esos primeros meses y la lactancia se volvió un placer de los dioses, me pareció absurdo total dejarlo.

Y es que ahora, con 3 años que tiene ya mi niña, no hay frases que me hagan sentir más amor que cuando dice por ejemplo:

* mami, ¿me das un poquito de ésta y después de ésta? (a veces incluso dice derecha e izquierda acertando o no).
* mamá, es que yo quiero estar con tu (querer estar conmigo significa que quiere teta)
* mami, esta teta antes de cenar y después la otra (nada como un buen postre casero).
* las tetas de la mami son de mi (son "incompartibles", esta frase no le gusta tanto al papá).

Hasta cuándo le daré es un misterio que aún está por resolver. No lo sé.
Lo que sí sé es que será hasta que ella quiera y más aún sé que a la adolescencia no llegará enganchada a la teta...por lo tanto disfrutaré de todo lo que me haga sentir muy cerquita a mi bebé, el máximo tiempo que pueda.
Los años pasan volando y no vuelven nunca atrás, si no disfruto de estas vivencias ahora...¿cuándo?

Y por favor, al que le parezca ridículo o vergonzoso ver a niños tan mayores mamando, que indague en su interior y analice cual es el verdadero motivo, porque si es por ser algo fuera de las normas, lo socialmente aceptado o lo establecido, tendrá que pararse a pensar que su libertad también corre peligro.

4 comentarios:

Manuel dijo...

Dr. Lawrence Gartner, responsable de la última declaración de la AAP, American Academy of pediatrics Work Group on Breastfeeding. Breastfeeding and the use of human milk. pediatrics, 1997; 100:1035-1039n: “La Academia no ha establecido un límite superior. Hay niños que son amamantados hasta los 4, 5 o 6 años. Esto puede ser infrecuente, pero no perjudicial” No hay razones científicas por las que se deba recomendar dejar la leche materna a una determinada edad.

Si la luna brilla, es porque se alimenta de la luz del sol.

Punto.

εïз Jackie εïз dijo...

Una razon mas para admirarte mi bella... tqmmmm!!!!!!!

Genín dijo...

Tienes toda la razón del mundo, el tema está entre Lunita y tu.
Si lees mi última entrada y ves el vídeo, verás las cosas que se hacen por convicción y solidaridad.
Besos y salud

El Velofondo dijo...

Sigue así Sylvie, mi niña que tiene la edad de Luna lo sigue haciendo, y te diré más yo con 36, lo hago de vez en cuando :P